A partir del próximo sábado 21 de septiembre, desde las 20 horas, en el bar Jäger, Humberto León con su guitarra y otros jazzistas que lo acompañarán, ofrecerán por cuatro sábados animadas sesiones de jazz clásico. La semana pasada pude escucharlos y constatar la maestría del maestro León, quien domina perfectamente su instrumento y sorprende por su habilidad, la cual es, sencillamente, deslumbrante. Si bien aquella vez no hubo muchos espectadores, los maestros del jazz que estaban en escena nos deleitaron con un programa clásico, donde abundaron piezas de Bossa Nova, la variante brasileña del jazz: La chica de Ipanema, Insensatez, Meditación, entre otras. Pero también abordaron piezas de otros géneros. Los pocos que nos reunimos esa noche, nos sentimos verdaderamente afortunados, pues los músicos estaban tocando casi nada más para nosotros. Se espera que, en las próximas sesiones, el número de espectadores aumente. La falta de los mismos tiene una lógica: era la primera vez que el Jäger ofrecía un evento de esta naturaleza y el público aún no lo tiene posicionado como un sitio donde se fomenta el jazz. Lo cual es un error, pues en Xalapa no abundan los lugares donde se le permite a los jazzistas mostrar sus creaciones de manera libre. Y este error tiene lógica: al ser la primera vez y no haber tenido la difusión suficiente, mucha gente ni se enteró. O llegó tarde: cuando los músicos estaban empacando sus instrumentos, para retirarse del lugar e ir a descansar, llegaron como cuatro espectadores, que se quedaron con las ganas de oírlos. De modo que si usted es amante del jazz y gusta de oírlo en un ambiente que le es natural, asista al Jäger puntualmente durante los próximos cuatro sábados. Este sitio está ubicado en Plaza del Sol, Araucarias 56, local 4a, en un callejoncito que está a dos cuadras atrás de la VW. La entrada al evento es totalmente gratuita.
P.D. Y, la vez pasada, el maestro León no tocó la batería, pero sí le sacó sonidos percutidos a la guitarra en una pieza, mas no tocando sobre la caja de resonancia, lo cual sería un recurso fácil, sino, sobre las cuerdas, pulsándolas a media fuerza, de tal suerte que escuchábamos una especie de percusiones afrolatinas de muy buen gusto y con un ritmo muy encendido, y con unos colores sonoros muy bellos y sugestivos.
Qué ganas de haber estado ahí. Yo sumaría a tu comentario el hecho de que a los lugares donde de repente se dan cosas de calidad no se les hace mucha difusión sobre todo de su "cartelera". Por cierto, Humberto León está empezando a tocar, en trío o cuarteto, los miércoles y viernes a las 8.30pm en la pizzería La Lola de la calle Mata.
ResponderEliminarSaludos y a ver qué día nos jugamos unas partidas cafeteras.