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jueves, 29 de octubre de 2015

Próximamente, un hermoso concierto en Xalapa

CONCIERTO DE LA OSFM

 
Tengo el gusto de invitarlos al concierto de fin de semestre que ofrecerá la Orquesta Sinfónica de la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana.
La Orquesta está integrada por alumnos de la clase Repertorio y Prácticas de Orquesta, que imparto con enorme gusto y placer a los alumnos de nivel profesional en un curso obligatorio de cuatro años.
El Concierto se llevará a cabo a las 12 horas del
Sábado 14 de Noviembre de 2015 en Casa del Lago, antes artesanías, Xalapa, Ver.,

PROGRAMA
Concierto No. 5 para violin y orquesta de VIEUXTEMPS
Solista: Fernando Cordoba


Primer movimiento de la sinfonía # 44 (Trauer) de HAYDN
Dos arias de La Reina de la noche de la opera La Flauta Magica de MOZART
Solista: Ivette

Concierto para violin y orquesta de MENDELSSOHN
Solista: Greta Zavala

                           Fernando Avila Navarro

La entrada es gratuita

martes, 27 de octubre de 2015

Para entender a The Walking Dead

Como Usted probablemente ya lo ha sospechado, estoy parodiando el nombre de un famoso libro de la época en que los boomers éramos jóvenes y revoltosos; sí, adivinó Usted, amable lector: se trata del libro Para leer al Pato Donald de Dorfmann Mattelart. O también al famoso ensayo de Sigmund Freud sobre la Caperucita Roja y el lobo. Decía mi suegro, Don Prisciliano Ramírez (QEPD) "piensa mal y acertarás". Veamos ¿Qué representan los zombies? Pues nada menos que a los migrantes hispanos. "Dispara a lo que te encuentres de frente" es la consigna. ¿A quién representa Rick Grimes? Pues a George Bush hijo; y, hablando de hijos, Carl Grimes, a Donald Trump cuando era niño. La blandengue Deanna Monroe, en cambio, es la representación de Hilary Clinton. Su espíritu democrático hace débiles a los buenos y pone en peligro su supervivencia.  Michonne es Condolezza Rice. Glenn Rhee, en cambio, simboliza el poderío comercial chino. Por esta razón, tuvo que morir en el capítulo de ayer, porque China quedó fuera del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica. Sabiendo que a los chinos les gusta decir "copelas o cuello", los países que firmaron este acuerdo se adelantaron a darle cuello a los chinos, incluído Glenn Rhee. ¿Ven como encaja? No me tomen en serio, ya saben que me gusta bromear, ja ja. Les dejo de tarea que averigüen a quién representa Sasha Williams y a quién Morgan Jones. Dejen volar la imaginación, se van a divertir.
Ya hablando en serio, el libro Para leer al Pato Donald, susbtitulado comunicación de masas y colonialismo, en la portada tiene al Pato Donald obsesionado con las palabras "oro, ocio, riqueza, imperialismo, consumo, fantasía, etc.".

Los temores de autores como Dorfmann Mattelart eran originados por el mal uso que de la propaganda hicieron en un principio los alemanes y después todo el mundo. Se temía especialmente a los usos que le dió el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial, con Goebbels a la cabeza. Entre los abanderados de esta lucha preventiva están los miembros de la Escuela De Frankfurt, la Teoría Crítica y personalidades como Theodoro W. Adorno, Horkheimer y Herbert Marcuse. Se temía especialmente a la publicidad subliminal; sin embargo, quien se haya dedicado al menos un poco a la comunicación y a la publicidad, sabe que aquello de que "una mentira repetida mil veces acaba convirtiéndose en una verdad" tiene un límite. Pues ¿Qué no perdieron la guerra los nazis con todo y sus mentiras repetidas hasta el cansancio? ¿Creen que yo (si tuviera el dinero para hacerlo) podría llenar el Estadio Azteca para un recital de piano con las obras más agresivas de Milton Babbitt repitiendo en Televisa y en MTV mil veces al día un spot anunciando el evento? Y, si por un azar del destino, logro llenarlo, ¿creen que lo volvería a llenar con esta estrategia?
Los mercadólogos, publicistas y comunicólogos saben que llenar un estadio como el Coloso de Santa Úrsula con un evento de esa calidad está en chino. Me refiero a un concierto donde los boletos se venden en taquilla, no llevando a la fuerza a un sinnúmero de alumnos de escuelas primarias o secundarias. Y no estoy emitiendo comentarios sobre la calidad de la música de Milton Babbitt, a quien respeto profundamente, pero de quien sé que su estilo es muy difícil de digerir por "el hombre de la calle". Alguien me dirá: pero si el reguetón es igualmente imposible de digerir y tiene un enjambre de públicos masivos. Dejo la pregunta en el aire: ¿Milton Babbitt se convertiría en un Rock Star si tuviera la publicidad que tiene Justin Bieber? De ser así, Theodoro W. Adorno y Dorfmann Mattelart tendrían razón; por lo pronto, yo seguiré viendo todos los lunes, puntualmente, la saga de The Walking Dead, sin temor alguno. Me divierte. Y quizá me prepara psicológicamente para sobrevivir a situaciones de crisis globales, cada vez más extensas, frecuentes y duraderas.

viernes, 23 de octubre de 2015

Se hace camino al andar

 En un pasaje del filósofo y escritor Jean Paul Sartre, se lee una reflexión de los pensamientos del autor antes y después de subir una enorme escalinata: al estar en la parte baja, pensaba que eran muchos escalones. ¡Qué flojera! Tal vez no tendría fuerza para subirlos. Estando arriba, en cambio, pensaba en la importancia de la constancia, del repetir pacientemente una y otra vez la misma acción, hasta llegar a la cima.
El tiempo pasa y uno también. Pero si uno está activo, al voltear la mirada hacia atrás, se puede sorprender por la capacidad de haber subido escalón tras escalón. Recuerdo que cuando empecé a estudiar la Maestría en Producción Artística y Mercadotecnia Cultural en Realia, ni siquiera tenía la intención de terminarla: la estaba tomando para entretenerme mientras llegaba la oportunidad para ingresar a un doctorado. Pero esa Maestría me alborotó el gusanito de organizar conciertos y lo primero que se me ocurrió fue organizar un recital para canto y piano, en la escuela. Después de siete años de estar retirado, había perdido bastante filo: esa vez, hubo 16 espectadores, 8 de los cuales eran familiares; sin embargo, entre lo aprendido en la nueva escuela y los recuerdos, de inmediato llevamos el recital a un foro más grande. Entre otras cosas, lo anuncié en este blog como "Aroma de dos Rosas", parafraseando a Emilio Carballido. Concluí así el artículo:

 "De esta manera, ambas artistas, proyectándose desde lo local, se lanzan a lo mundial, de acuerdo con las tendencias modernas de la cultura global, ofreciendo un programa que no sólo deleitará a los más exigentes conocedores del Bel Canto, sino al público en general. Un recital de canto es un acto de creación colectivo, donde el piano juega un rol tan importante como el de la voz. Rosaura González se graduó con mención honorífica de la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana (la UV) con Víctor Filobello como profesor y director de tesis. Rosaura es miembro artístico de la organización Katarsis, Creación y Gestión Cultural, donde participa en diversos performances y puestas de escena. Ha cantado como solista en los Festivales de Pascua 2008 y 2009 con el Ensamble de Madrigalistas de la UV, y cantó el papel protagónico en el estreno mundial de la ópera Tropical de Francisco González Christen; también ha cantado los roles de Marcelina y Dorabella de Cossí fan Tutte de Mozart en el X Encuentro operístico "Artescénica 2010" en Saltillo, Coahuila, dirigida por Iker Arce y Osvaldo Martín del Campo. Ha tomado clases magistrales con Armando Mora, Arturo Rodríguez, Katherine Ciesinsky y Maureen O´Flynn. Actualmente recibe clases de perfeccionamiento con la maestra Zintzuni Cardel. Rosa Luz Morales Ramírez, egresada de la Licenciatura en Música, cursó toda su carrera con los maestros Patricia Castillo y Enrique León España; ha tomado clases magistrales con Bernanrd Flavigny y Jorge Federico Osorio; actualmente prepara su examen de titulación bajo la guía de la maestra Citlalli Guevara. El recital se llevará a cabo en el teatro de El Ágora de la ciudad de Xalapa, a las 20:30 horas. No se lo pierda".

El Teatro de El Ágora de Xalapa en aquella ocasión estaba hecho un desastre: ya no era el novedoso teatrito de la década de los ochenta del siglo pasado. No tenía luces. Tampoco se podían utilizar los proyectores de cine. Para colmo, la administración se mostró poco profesional cuando quisimos hacer "Lunas de octubre" al año siguiente. De modo que nos fuimos a la Sala Chica del Teatro del Estado, la Dagoberto Guillaumín. Fue nuestra primera respuesta a las encuestas que levantamos en El Ágora: la gente ya no se conformaba con ver a un par de músicos estáticos vestidos como pingüinos durante casi dos horas: quería luces, vestuario, acción, música con cuarteto de cuerdas. Preparamos el nuevo evento y se lo ofrecimos al público.
Así que de nuevo publiqué en este espacio:

"Jueves, 3 de octubre de 2013


"Lunas de octubre" cambiará de sede y fecha

El evento "Lunas de octubre" de la organización Katarsis, música y danza (pronto cambiará de nombre, por razones legales), espectáculo multidisciplinario de canto, música en vivo, danza y proyecciones, se cambiará de fecha y lugar debido a la falta de profesionalismo de la actual administración de "El Ágora". Los hechos: el que ésta suscribe solicitó el auditorio de dicho lugar para realizar dos eventos, uno el 17 de agosto del presente año, mismo que se llevó a cabo a pesar de la nula promoción por parte de El Ágora (y se habían comprometido a apoyarnos con algo de promoción y/o publicidad) y otro para el 19 de octubre. Se le estuvo dando seguimiento a este evento hasta hace unas semanas y el Sr. Uriel Sandoval nos confirmaba que nuestro evento estaba agendado. Hasta que, hace unos días, llegué con un par de carteles para colocarlos en la sede del evento y fue hasta ese preciso instante en que el Sr. Sandoval me informó que nosotros no teníamos reservado el espacio. En su lugar estaba una asociación civil, unas horas antes, las suficientes para dejarnos sin la posibilidad de montar nuestra escenografía ni permitir que nuestros artistas realizaran su calentamiento. Nosotros, aunque no somos artistas de rating internacional, tampoco somos unos principiantes que merezcan ese trato: somos ganadores de Estímulos para creadores con Trayectoria, de premios nacionales y estatales, y hemos participado en festivales nacionales e internacionales como el Cervantino, el Junio Musical, el Foro de Música Nueva, etc, etc."
El Teatro del Estado, con un equipo ya bastante antiguo, aún es funcional. Con la ingeniosa escenografía de Claudia Olvera el respetable público pudo ver cómo la luna subía y ascendía en la misma dirección y durante el mismo tiempo que lo haría en la vida real. Todo esto, gracias a un proyector de 1500 lúmenes y una pantalla de gasa. Ese día, mi encuestador no me entendió y no se pudieron recoger suficientes encuestas, de modo que no le pudimos tomar el pulso a los públicos que se dieron cita ese día; pero, al año siguiente, previo cambio de nombre y de sede (porque nos ganaron el Teatro del Estado otros productores), hicimos Historias bajo la luna en La Casa del Lago, un poco más pequeña y con otro cuarteto: No sé que pasó con los músicos del cuarteto anterior. Pero si recogimos bastantes encuestas y nos dimos cuenta de que íbamos en la dirección correcta. Probablemente los del cuarteto Plenilunio se estaban preparando para cambios importantes en su vida y no quisieron distraerse con nuestro pequeño proyecto. Parte del encanto de este programa eran las canciones de Ángela Peralta transcritas para mezzosoprano y cuarteto. De nuevo nos apoyamos en un proyector de pocos lúmenes y la misma pantalla de tela y las cosas salireon bastante bien.
http://azdiario.mx/2014/11/01/narrara-katarsis-artes-escenicas-sus-historias-bajo-la-luna/
Este año quisimos hacer lo mismo en Tropical, pero el escenógrafo y nosotros hablábamos idiomas diferentes: él quería cinco proyectores de 10 000 lúmenes y sus respectivas retropantallas. Cuando nos dimos cuenta del costo, por poco y nos vamos de espaldas: el solo alquiler de los proyectores duplicaba el costo de la producción; afortunadamente cambiamos de plan y con una combinación de pantallas HD y un telón de fondo, la escenografía nos quedó bastante vistosa; literalmente, de película.
La relación de todo esto con la escalinata de Sartre es que, en 2013 empezamos con un recital para canto y piano, con 16 espectadores y sin escenografía. En 2015 llegamos a presentar una ópera con orquesta sinfónica, coro, bailarines, luces, escenografía y vestuario, ante públicos mucho más numerosos. Si en julio del 2013 me hubiesen dicho que tenía que hacer la producción de Tropical como lo hicimos en 2015, me habría muerto de la risa. O del terror.
La ironía de todo esto es que mi artículo "Aroma de dos Rosas" es el quinto artículo de mi autoría publicado en este blog que más ha sido leído, en tanto que otros que he escrito después para promover "Lunas de octubre", "Historias bajo la luna" y la ópera "Tropical", entre otras cosas, tienen un rating mucho más bajo. Cosas de la vida.
Creo que nos fue bien. Complacimos al público dándole algo más que un grupo de pingüinos estáticos haciendo música durante hora y media. Metimos a escena algo parecido a un Rolls Royce descapotable 1928 y sin embargo, hubo quien dijo que la producción era pobre. Los mercadólogos saben que es muy importante apostarle a la calidad total y que esto tiene un costo. Y se tienen que medir los costos de producción con los ingresos por ventas. Y, la verdad sea dicha, Xalapa no da para producciones más costosas que la que nosotros hicimos los días 26 y 27 de septiembre de este año. Afortunadamente, hubo quien se dio cuenta de nuestro esfuerzo: http://www.oem.com.mx/diariodexalapa/notas/n3980997.htm

jueves, 22 de octubre de 2015

Ópera Tropical y generaciones perdidas

Si bien a estas alturas ya hay al menos dos óperas de nombre "Tropical", la mía es la más antigua y la más reciente es de un alemán. Otra cosa que tenemos en común los compositores de ambas óperas es el nombre "Santiago". Ante todo, voy a hablar de la mía, porque de la otra no tengo tanta información, aunque se ve que está divertida: me hizo bastante gracia cuando uno de los personajes cantó "quiero vivir en Sudamérica" (Parodiando a "I want to live in America").
Ahora que presentamos "Tropical, la ópera veracruzana", aplicamos una encuesta de salida a los espectadores de las funciones de los días 26 y 27 de septiembre de este año. O sea, (como diría "El Pirruris", personaje que ojalá y pronto vuelva a la escena, porque era muy cómico) estamos hablando del año 2015. Del tercer milenio. ¿O el segundo d.C:? Depende del uso del cero para iniciar la cronología de la era cristiana.
Ya entrando en materia, la mayor parte de públicos que asistieron a nuestra Tropical (y que además marcaron su preferencia) tienen un rango de edades de entre 51 y 69 años. Esto es, Tropical gusta a los baby boomers. Claro que ahora, lo de "baby" ya es un decir. Tiene lógica: yo también soy un boomer, pues nací en 1952. Lo sorprendente es que el segundo segmento más fuerte fue de públicos de la Generación X, que se supone que tienen gustos diametralmente opuestos a los boomers.
También hubo bastantes espectadores de La Generación Silenciosa, aquella que reemplazó a Agustín Lara por The Beatles en materia de gustos musicales. Esto me parece curioso, porque la temática de la ópera gira en torno al Agustín Lara de 1930. Quizá otro factor es la perfilación del público que nos visitó: la proporción de encuestados tuvo una relación aproximada de dos mujeres por cada caballero y su nivel de estudios, principalmente era de Licenciatura y en segundo lugar de Postgrado (sin precisar si eran Maestros o Doctores). El tercer segmento importante fueron los Millennials, jóvenes de entre 16 y 29. Desde luego, los representantes de La Generación Grandiosa, la Interbellum o La Generación Perdida no estuvieron presentes, porque ya no están sobre la superficie de este planeta. (QEPD).
Lo interesante es que el personaje protagónico, Toña la Negra, generacionalmente es de la Generación Interbellum (1900-1913), según una clasificación, o de la Generación Grandiosa (1901-1925), según otra clasificación. Agustín Lara, según si se le considere de 1897 o de 1900, sería o de La Generación Perdida, o de la Interbellum.
Estas clasificaciones están pensadas más para públicos norteamericanos, pues en México se podría decir que sólo hay una Generación Perdida que inició en 1821 y continúa hasta la fecha (estoy bromeando).
El encanto de las generaciones Perdida e Interbellum es que vivieron los alegres años veintes y la depresión económica del 29. Les gustaba el jazz. Quizá algunos son abuelos de varios de la Generación X. Por algúna razón, la generación que tuvo su primera etapa productiva o sus primeros triunfos entre 1920 y 1930, es una generación tan encantadora como la que lo hizo en la década de los 90 del siglo XX. Me atrevo a pensar que por esta razón Tropical, la ópera veracruzana también interesó a públicos no boomers.

lunes, 19 de octubre de 2015