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miércoles, 25 de septiembre de 2013

Huracanes y desastres.

En 1992 compuse, por encargo del Maestro Manuel Enríquez, un par de poemas sinfónicos cuya colección se tituló "Imágenes de Veracruz". El segundo de ellos, se llama "Cuando el Tajín se desata", basado en la leyenda del Tajín, el niño que se volvió Dios o, simplemente, el Dios Huracán, el Señor del Trueno y las Tempestades, entre los antiguos totonacas. Independientemente de la corrección de la leyenda que tomé como base, en este poema traté de hacer sentir al público: 1) Las señales de que se avecina una tormenta 2) Un himno por los hombres que ofrendaron su vida al mar 3) La tormenta: un huracán en el mar y 4) La vuelta a la tranquilidad, la vida regenerándose gracias a la abundancia del agua, un líquido vital para todos los organismos vivientes de este planeta.
Estos poemas se estrenaron en 1992, en el auditorio Josefa Ortiz de Dominguez de la ciudad de Querétaro, con capacidad para 5000 espectadores. Ese día, por ser 2 de noviembre, la entrada estaba floja y sólo había 3000, aproximadamente. Mi obra alternó con la Sinfonía Del Nuevo Mundo de Anton Dvorak y el Bolero de Ravel. Dos obras de "rompe y rasga", como decía mi profesor Héctor Quintanar. Con orgullo, puedo decir que mi poema no salió ni roto ni desgarrado, sino que alguien del público comentó a mis espaldas, sin saber que yo era el compositor: "no compone tan mal este sujeto". Lo que significa: "si juegas contra un Gran Maestro de ajedrez y pierdes en un final de peones porque el maestro coronó un tiempo antes que tú, es que eres bravo". Es decir, el maestro gana, pero su adversario estuvo a la altura. La prueba de ello fueron los autógrafos que me pidió el público al terminar el concierto. Entre ellos, estaban el Gobernador en turno de aquel lugar y una compositora de nombre Rosa Gurayeb, a quien yo no conocía personalmente. Ambos me manifestaron su beneplácito por mi obra. Confieso que el primer poema, llamado "En los portales de una ciudad bullanguera", no me dejó totalmente satisfecho. Donde sí sentí que estaba jugando en las grandes ligas al tú por tú con Ravel y Dvorak fue con "Cuando el Tajín se desata".
Sin embargo, las autoridades políticas y culturales del estado de Veracruz, al parecer tienen otra opinión: pasado un tiempo, doné los derechos patrimoniales de "Cuando el Tajín se desata" para que el Gobierno del Estado de Veracruz, en caso de contingencias como las actuales, invitara a diversas orquestas sinfónicas del Estado y del país a hacer conciertos extraordinarios, con esta pieza como parte del programa, a fin de que se recaudaran fondos para auxiliar a las víctimas del desastre. Yo soy el último en entender el menosprecio que ha sufrido mi obra. Esta donación se hizo en tiempos del gobernador Miguel Alemán Velasco, así que es probable que la hiciera entre 1998 y 2004. Lo más probable es que haya sido en el año de 1998, cuando hubo una terrible inundación en el norte de nuestro estado.
Toda la vida me he cuestionado la razón de este menosprecio, que me resulta insultante ¿Es la arrogancia, cerrazón y egoísmo de los gobernantes? ¿O la arrogancia es de los directores de orquesta locales, aderezada con una dosis de racismo cultural? ¿O simplemente, el oficial de partes del Gobierno del Estado nunca le mostró la partitura y el escrito de donación al C. Gobernador? Me inclino por esta última hipótesis. Es probable que quien recibió mi escrito y mi partitura haya sido un(a) licenciadete medio inculto, quien ignoró por completo el valor y el potencial de mi obra y lo archivó en un cajón. Donde tal vez otro licenciadete, años después, ordenaría que tiraran mi obra a la basura. Como lo hizo Félix Báez, en el IVEC, con una investigación que realicé durante mi segundo Estímulo a Creadores con Trayectoria.
Yo, año con año, cada vez que esto sucede, hago mi donativo y, entre más endeudado esté, más me duele no apoyar con una cantidad más significativa. Sé que si mi obra se ejecutara en público, mi aportación sería mucho mayor. Tal vez mi obra es una basura que no merece ser escuchada. Le paso a Usted, amable lector, el turno para que decida si mi obra es una porquería o realmente sí merece ser tomada en consideración para luchar hombro con hombro junto a los seres humanos para captar ayuda en favor de los damnificados. Los cuales también podrían ser de otros países: el huracán Katrina realizó grandes destrozos en Nueva Orleans, y los países de Centro América y del Caribe, año con año están en riesgo de padecer esta situación.
Hay varias maneras para acceder a un vídeo que realicé con la versión del Maestro Sergio Cárdenas. La grabación está tomada con una humilde grabadora casera de marca Panasonic de aquella época y en vivo. Pero se alcanza a percibir bastante bien la obra. Hay varias maneras de acceder a él: haciendo clic en la imagen que acompaña a este artículo, o buscando (tanto en google como en YouTube) la frase Cuando el Tajín se desata; o, simplemente, haciendo click en este link: 

http://www.youtube.com/watch?v=x8MVupCWTLA&feature=player_detailpage

P.D. Por alguna razón en YouTube, este vídeo está marcado con cinco estrellas rojas. No sé que signifique eso y si el público lo pueda ver. Pero, por algo será.

3 comentarios:

  1. Aunque sé que las redes sociales sólo difunden masivamente las publicaciones de "los nobles" y yo soy un simple plebeyo, confió en que este mensaje no será en vano y alguien lo escuchará. No es posible que haya tanta arrogancia y egoísmo. No creo que los aludidos tengan el corazón de piedra. Asumo la responsabilidad por mi torpeza para comunicarme hacia 1998. Aunque, como soy plebeyo, no tenía otra manera de comunicarme con los poderosos. Como tampoco la tengo hoy.

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  2. Tal vez mi tono moleste a "los nobles". Espero que comprendan que no es agradable pasar 15 años creyendo que se hice una gran cosa que podría ser útil para la humanidad, cuando, en realidad, lo único que se hice fue basura. Pero, me resisto a creer que lo que compuse en 1992 es basura. Y, es que una indiferencia de 15 años pesa demasiado en el ánimo. Me cuesta trabajo decirlo en dinámica suave y con sordina.

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  3. Fe de erratas quise decir "hice" en vez de "se hice". Pero no encuentro la manera de editar el comentario y corregirlo.

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